¡ Hola, tanto tiempo ya !
Estamos en el mes de mayo, principio de mes para ser más precisa, y en ésta semana todos nos enteramos de una noticia muy triste: hace pocos días que murió el gran Abelardo Castillo.
"... Creo en la literatura como testimonio, como arte ..."
" La Literatura es una conversación con Dios en el Infierno ..."
Ésta semana, el día martes 2 de mayo, fue el día en que se produjo el deceso del gran escritor argentino Abelardo Castillo.
Tristísima pérdida en el ámbito cultural de éste país y de latinoamérica diría también, era un magnifico autor y formador de escritores por medio de sus míticos talleres literarios.
"... La ficción, si es literatura auténtica, no puede más que decir la verdad ..."
Primero tengo que decir que mi admiración hacia él va más allá de su obra literaria de qué es lo que ha escrito a lo largo de tantos años. Pienso que, como en muchos otros aspectos de la vida, una admira al otro por un sinfín de hechos sutiles o tal vez un poco inconexos uno del otro, que te hacen pensar "wow" en un momento especifico. Hay personas a las que es un verdadero placer leer y escuchar, personas con las que sentís que no alcanzan las horas del día para poder tener una conversación. Creo que la lectura es justamente una conversación con las mentes de los autores que las han escrito. Leer es un acto de entrega en la que le das a un libro horas de tu vida: te adentrás en algo que te es absolutamente desconocido, nuevo, desde otra perspectiva diferente a la tuya.
A mi me gusta mucho las personas sabias, aquellas que una se pone a escucharlas y se da cuenta de que saben de lo que hablan pero no lo dicen de modo prepotente ni soberbio sino más bien con modestia del querer realmente explicarte algo de buena manera y que la logres entender de forma natural, sin forzarte a hacerlo. Me parece que él era así en gran parte formando a lectores y a partir de ello formando a escritores (porque ya sabemos que uno va adquiriendo por medio del hábito de la lectura su propia forma de ver el mundo y de querer escribirlo y explicarlo a los demás).
Hay escritores argentinos a los que si partimos de la base de su edad podríamos admirarlos por haber formado parte de los años más gloriosos y míticos de la cultura argentina. Por haber podido hablar con otros grandes (Borges, Bioy Casares, Sábato, Cortazar, sin fin de otros nombres ) y vivir/escribir en los años en que la industria editorial argentina era realmente muy importante. Obviamente con el paso de los años, gobiernos que se sucedieron uno tras del otro ( gobiernos democráticos, golpes militares, vuelta de la democracia, crisis, etc) fue variando el tema y ciertas cosas decayeron aunque no estoy hablando en términos literarios sino en términos de cantidad de editoriales pertenecientes a dueños argentinos. En ésos términos acaba de morir uno de los últimos testigos protagonistas de la literatura argentina del siglo XX.
" Todo escritor está fundado en su manera de leer "
Es algo que nos hace remitirnos al maestro Borges cuando decía:
"... siempre les aconsejé a mis estudiantes: si un
libro los aburre, déjenlo.
No lo lean porque es famoso, no lean un libro porque es moderno,
no lean un libro porque es antiguo. Si un libro es tedioso para
ustedes, déjenlo...
ése libro no ha sido escrito para ustedes.
No hay que caer en la tristeza de las bibliografías, de la citas
de Fulano y luego un paréntesis, luego dos fechas separadas por un guión, y
luego una lista de libros críticos que han escrito sobre ése autor. Todo eso es
una desdicha, yo nunca les di una bibliografía a mis alumnos.
Shakespeare no leyó una sola línea sobre sí mismo y escribió la
obra de Shakespeare. Si Shakespeare les interesa, está bien.
Si les resulta tedioso,
déjenlo..."Guiarte por tu brújula interna de gustos hasta ir realizando una telaraña de lecturas relacionadas por la visión del lector mismo. Ésa sería la idea para formarse uno mismo como lector.
Y aquí hablaré de lo que considero un hermoso concepto de Abelardo, que una misma realiza sin darse cuenta, en cuanto una persona empieza a leer.
Abelardo nos habló en muchas entrevistas de su propia forma de leer, que es un poco el de muchos -me incluyo- lectores realizamos:
Habla de formar nuestras propias "familias espirituales" su método es el de por ejemplo:
Un lector se encuentra leyendo un libro que le encanta y es de X (equis) autor. Lee de él y le maravilla y quiere encontrar otros libros más que leer y que le gusten tanto como ése libro ha conseuido gustarle, entonces se decide a averiguar qué clase de libro le gustan a ése autor y asi averigua que le gustan A, B y F autores.
Ya que un escritor escribe a partir, en gran modo, de qué libros han sido sus influencias, entonces los gustos de equis (ya que al lector le gusta equis) serán del gusto del lector. El lector puede leerlos y así sucesivamente.
A un gran autor es probable que le gusten otros grandes autores y el lector siguiendo éstos sutiles y útiles rastros se irá formando su propio camino lector y leerá grandes libros.
El lector irá formando sus "familias espirituales" formadas de escritores a quienes admira y siente tan cercanos y queridos como a familiares que ha conocido desde siempre.
Como al minuto y un poco más explica ésto
de las "familias espirituales"
Un amor como de cuento
La pareja de escritores formada por Abelardo Castillo y Sylvia Iparraguirre es una de mis preferidas desde que empecé a leerlos en mi adolescencia aproximadamente
Me gusta mucho leer entrevistas y biografías de autores y sin lugar a dudas la pareja de Castillo e Iparraguirre me parece absolutamente encantadora y bonita en un muy buen sentido. Ella es su par en el rubro, es escritora, su lectora de consulta y su esposa por más de cuatro décadas.
Me pareció absolutamente desolador la muerte de Abelardo Castillo también por su viuda. Debe ser un hecho tremendo querer tanto a alguien, fundar toda una vida juntos, crecer en todos los aspectos,
tener tanta complicidad, camaradería y amor con tu pareja "hasta que la muerte los separe" que me parece tristísimo. Y además su muerte es inesperada ya que fue causada por complicaciones derivadas de una operación que se realizó Abelardo hace unas semanas. Terrible.
Partamos del modo en que se conocieron, ya que lo pudimos leer cuando publicó sus Diarios, según el punto de vista del propio Abelardo Castillo:
(...) A fines de noviembre apareció,
como un milagro, la muchacha increíble
aquella que hace un año
( ¿o más? ) llegó una noche con José Antonio Barzac.
Esa vez yo pensé: lo envidio. No miento si digo que la sentí como hecha para
mí.
Poco tiempo después de esa primera noche, volví a verlos juntos. ¿Cómo
puede ser que se entiendan?, pensé. Yo hacía esfuerzos por no mirarla, para
evitar que él pudiera sentirse incómodo. Me acordé de mí y de Bettina al
principio. Esta segunda vez, sin embargo, ella parecía distante, ya harta
quizá. Y a fines de noviembre volví a verla. Al principio no la reconocí:
sólo
me produjo la misma impresión que la
primera vez.
Pero, antes; días que estuvieron
al borde del estallido y que no hubiera podido sobrellevar sin la literatura (...)
Es una de ésas parejas hermosas de lectores/escritores que a mí personalmente me parece ideal y preciosa. Me parece que son de ésas parejas que tienen como gusto en común el gusto literario aunque no necesariamente amen los mismos libros y un respeto y un amor cotidiano y constante. No sé si me estoy explicando de modo que me comprendan bien a qué me refiero.
Tal vez a modo de ejemplificarles bien les debo recomendar que lean y vean entrevistas y por ustedes mismos saquen conclusiones
(...) Cada uno tiene sus ritos. Abelardo me persigue para leerme
cosas.
Me gusta que lea poemas en voz alta (...)
(...) "Yo no le
presto libros", reveló entre risas Castillo, quien agregó en un guiño a su
mujer desde hace cuarenta años "que la gente de la Carrera de Letras cree
que tiene que marcar y subrayar todos los libros"
La pareja de escritores tampoco evitó exteriorizar las diferencias entre sus
respectivos procesos creativos. Mientras que Iparraguirre señaló que casi nunca
muestra sus textos antes de que estén terminados, Castillo confesó que es capaz
de leerle a su mujer "las primeras tres líneas de un cuento" (...)
Me parece además que son de ésas ausencias que son demasiado palpables, ya que es toda una vida de convivir, de repente pasa ésto y debe ser algo muy shockeante.
Sus Talleres Literarios
De sus talleres literarios también ha hablado mucho y sabemos que han salido muchos escritores argentinos importantes en las últimas décadas. Generaciones de cuentistas tales como Rodrigo Fresán, Juan Forn, Gonzalo Garcés, Pablo Ramos y Samanta Schweblin entre tantos otros.
Los talleres, él ha dicho y pueden leerlo en la entrevista realizada por Eterna Cadencia, titulada "La última entrevista de Abelardo Castillo: la literatura no es lo que yo hago, es lo que yo soy" , en la que él decía que no enseñaba a escribir sino que lo que enseñaba era " a aprender " :
(...) Todo escritor aprende a escribir.
Se aprende de los que
están alrededor tuyo, no del profesor.
El que aprende algo de
mí solo aprende lo que me sirve a mí. Lo que yo tal vez puedo enseñar es a
aprender. Qué libros debería leer esa persona de acuerdo con sus
características, el tono de su prosa o los problemas que le preocupan, o cuáles
en contra de esas características. En cuanto a aprender, se aprende solo. No me
voy a poner a explicarle donde va una coma o sugerirle una historia. Vengan o
no al taller, escribir es una operación de la soledad.
Lo primero que digo acá
cuando viene al taller es: si lo que te importa es publicar, te equivocaste de lugar.
Si lo que te importa es
buscar una aprobación, también te equivocaste e lugar.
Si alguien aprende
algo, está referido al acto de escribir, no de ser famoso ni publicar (...)
Sobre memorias, diarios y obra literaria
En su libro "Ser escritor" nos postulaba:
(...) Los novelistas y los editores creen que una novela es más
importante que un cuento. No les creas. Sólo es más larga.
Los cuentistas afirman que el cuento es el género más difícil.
Tampoco les creas. Sólo es más corto. El cuento es difícil únicamente para
aquellos que nunca deberían intentarlo. Para Poe era facilísimo para Cortázar,
Chéjov o Hemingway también (...)
En cuanto a la publicación de sus Diarios, Abelardo Castillo, planteó la diferencia entre la publicación de memorias y la de diarios:
(...) Uno nunca recuerda bien y a
veces lo hace con deliberada mala memoria.
Es la diferencia entre las memorias y el diario.
El diario uno lo escribe para olvidar. Escribe sobre algo
reciente que le está pesando mucho y que se quiere sacar de encima. Por eso en
general son tan dramáticos.
Las memorias, salvo cierto tipo de confesiones como algunas de
Tolstoi, Rousseau o San Agustín, suelen ser bastante novelescas y mentirosas
(...)
En muchos momentos expresó que si alguien quiere conocer a un escritor debe recurrir a su ficción, no a sus diarios. Ahi es donde trazan un mapa biográfico literario:
(...) En cambio todo texto
literario de alguna manera es un hito en un mapa autobiográfico...
Los cuentos fantásticos de Poe son su autobiografía mental o
espiritual.
¿Qué lo define más? ¿Que anduviera borracho en la calle y se cayera
delante de la gente o ese texto de 'La caída de la Casa Usher'? Yo creo que lo
define su obra (...)
También debemos recordar que Abelardo Castillo se autodenominaba agnóstico pero cuando quería expresar en qué él tenía fe, habla de la literatura:
Sé que la literatura siempre da testimonio de algo. Del autor,
de su mundo. Creo en la literatura como conocimiento. No hay más verbo que
creer.
Pero a veces el "creo" es una manera tímida o ladeada
de eludir el 'sé', cuando me da pudor usarlo.
La fe para todo escritor es la literatura (...)
Como vieron la muerte de Abelardo Castillo me entristeció bastante, no creo ser la única para nada, y en ésta entrada del blog intenté hacerle un homenaje a mi modo tratando de trazar en rasgos generales aspectos de su vida lectora, escritora, es decir, de cómo influyó en formar nuevos escritores y lectores.
La muerte de Abelardo se suma a las últimas tristezas, de nosotros los lectores, que constituyeron hace unos meses los decesos de Alberto Laiseca y Carlos Rivera.
Las personas que dejan huella por medio de su arte, de su escritura sería en éste caso, superan lo que es su vida mortal y terrenal. Sus palabras atraviesan el tiempo y las generaciones y son inmortales.
Que descanse el maestro Abelardo. Se nos fue un miembro de nuestras "familias literarias" un poco más lejos pero aún podemos leerlo y tenerlo cerca en sus libros.
La muerte de Abelardo se suma a las últimas tristezas, de nosotros los lectores, que constituyeron hace unos meses los decesos de Alberto Laiseca y Carlos Rivera.
Las personas que dejan huella por medio de su arte, de su escritura sería en éste caso, superan lo que es su vida mortal y terrenal. Sus palabras atraviesan el tiempo y las generaciones y son inmortales.
Que descanse el maestro Abelardo. Se nos fue un miembro de nuestras "familias literarias" un poco más lejos pero aún podemos leerlo y tenerlo cerca en sus libros.
Así es como estoy finalizando ésta entrada
que trató acerca de Abelardo Castillo y su muerte en ésta semana de mayo de 2017.
que trató acerca de Abelardo Castillo y su muerte en ésta semana de mayo de 2017.
Me despido de ustedes por ésta vez.
Bye, bye.
Merci Bookú
La poesía no es una manera de escribir,
es más bien un modo de vivir,
de percibir el mundo
es más bien un modo de vivir,
de percibir el mundo
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